en el cole de mi hijastro mandaron una actividad sobre la “diversidad familiar”. aparentemente, una propuesta bonita: completar unas fichas, contar su historia, que la familia participe... pero bastó ver el primer dibujo para entender que esa supuesta “diversidad” no nos incluía.

no existían familias monoparentales. no existían familias con dos mamás o dos papás. y, por supuesto, tampoco existía la nuestra: la familia que se forma después de una separación. no existía la familia ensamblada. no existía yo.

¿dónde estaba nuestro lugar?

en clase de mi hijastro hay más peques que viven entre dos casas, que conviven con nuevas parejas de sus progenitores, con hermanastros, con madrastras o padrastros que también les cuidan. así que no entiendo la simplicidad de esta actividad. porque si no te ves representado, ¿cómo cuentas tu historia?

el texto original decía: “vivo en la calle tal, número tal, en tal ciudad”.

pero mi hijastro vive en dos calles, en dos casas, en dos familias distintas. así que decidimos cambiarlo. papá y yo modificamos el texto para que pudiera hablar de su realidad sin sentirse fuera.

como pequeño acto de resistencia, escribimos juntos que vive con su mamá en una casa y con su papá y su madrastra en otra. porque esa también es su historia. porque eso también es familia.

y si algo tengo claro es que ningún niño o niña debería sentir que su historia está mal contada, o peor aún, que no merece ser contada.

de pequeño a pequeño gesto, podemos lograr algo enorme: que cualquier peque se sienta orgulloso de la familia que tiene.

dejemos de excluir los modelos de familia que ya existen. luchemos por un mundo en el que todas las criaturas puedan mirarse en el espejo del aula y decir: “yo también tengo un lugar aquí”.

esta historia no es mía.

es de una seguidora valiente que decidió contarla.

y me encantaría saber qué opinas tú.
¿alguna vez sentiste que tu familia no cabía en las actividades escolares?

¿qué harías tú si esto te pasara?

y aprovecho para contarte que hoy se estrena en cines de toda españa la película tras el verano.
te animo de corazón a que vayas a verla, a que reflexiones, porque todavía hay mucho que cambiar.
y pienso que esta película es un buen primer paso.